Taetro ya recibe obras para el XXI Certamen Rafael Guerrero

'Esquirlas en blanco y negro'. Luis Fernando de Julián.
Foto: Zúh Malheur.
Taetro acaba de abrir el plazo de admisión de obras para su XXI Certamen de Teatro Mínimo Rafael Guerrero. Tras comunicar el fallo del jurado de la última edición hace un par de semanas, la asociación presidida por Eufrasio Jiménez trabaja desde ya en la búsqueda de textos que participen en una nueva convocatoria del premio que, con la colaboración de la Delegación municipal de Cultura, lleva el nombre de Chiclana por todo el mundo. Todo aquel autor (profesional o amateur) que quiera concurrir en él tiene de plazo hasta el próximo 30 de septiembre del presente año para enviar sus originales. Como viene siendo norma de la casa, los participantes pueden remitir un máximo de dos obras al correo electrónico teatrominimochiclana@gmail.com siempre que cumplan con los requisitos solicitados por la organización y que se pueden consultar en la web del colectivo: http://taetro-teatrominimo.blogspot.com.es/.

Las obras, de temática libre y con una duración máxima de diez minutos de representación, serán estudiadas por un jurado de prestigio que emitirá el fallo durante la celebración del Día Mundial del Teatro (alrededor del 27 de marzo de 2020). Los premios consistirán en la publicación de las obras seleccionadas en un libro en el que colabora el Ayuntamiento de la ciudad, así como la representación a cargo de los miembros de Taetro de aquellas piezas que estos consideren oportuno. En la última edición se premiaron ocho textos españoles y otros dos remitidos respectivamente desde Argentina y Estados Unidos.

Taetro celebra 20 años de mínimos con el estreno de tres nuevas piezas

Taetro está de enhorabuena por partida doble, puesto que este año celebra sus 30 años como asociación y los 20 desde que pusieron en marcha su Certamen de Teatro Mínimo Rafael Guerrero. Para celebrarlo, este viernes 12 de abril a las 21.00 horas estrenan tres nuevas obras de este género teatral marcado por la inmediatez y por la economía en recursos escénicos. El lugar, el Teatro Moderno, que también cumple dos décadas de vida.

Una de las piezas, pertenecientes a la decimonovena edición del concurso, es original de la autora chiclanera Pepa de España, directora del Grupo de Teatro Ilusión y que con Mi oxígeno se marca un tour de force dramático, alejándose de los terrenos de la comedia que tan bien domina. Esta obra cuenta con la colaboración de la compañía gaditana Labaranda cuyo director artístico, Gari León, es también el director del montaje. Aurora Alcántara, Juan de Lorenzo y Alfonso Saucedo (estos dos, integrantes del Taller de Teatro Grecolatino de Taetro) forman el elenco actoral.

La segunda obra en saltar a las tablas del Moderno será Esquirlas en blanco y negro del autor madrileño Nani de Julián, del que Taetro ya estrenó hace un par de años otro mínimo dirigido por Paco Téllez. Precisamente Téllez se encarga de poner en escena este texto en el que también actuará acompañado por Marga Ríos y José Luis Sánchez Johny.

El montaje que cierra la velada cuenta con la dirección de Pepe Raya y las interpretaciones de Ana Belén Ruiz, Antonio Meléndez y Juan Carlos Morales. El líquido de los astros es el nombre de una obra original del granadino Rafael Ruiz Pleguezuelos, autor que también fue premiado con anterioridad en el certamen.

Taetro anima a todos los chiclaneros a asistir a este pase especial de mínimos para celebrar el vigésimo aniversario del certamen y desde la organización anuncian sorpresas para el público presente. El precio de la entrada es de 5 euros y el evento cuenta con la colaboración de la Delegación municipal de Cultura.

El silencio

La representación teatral está plagada de signos, elementos o motivos que encarnan su razón de ser: los personajes, la interpretación, la palabra, los diálogos, el gesto, el movimiento, etcétera, etcétera. Es la función de aquellos que nos acercamos a este oficio, el ordenarlos de tal forma que lo que ocurre sobre el escenario atrape y seduzca al espectador. 

De todos ellos hay uno que siempre me ha atraído enormemente y es, el silencio. Siempre he pensado que no hay nada más hermoso que los silencios, o pausas dramáticas, que le llegan a los espectadores durante una representación teatral.

Los silencios dan el ritmo telúrico al espectáculo, pero mal utilizados pueden ser su puntilla. Esto hace que sea muy complejo situar las pausas durante una representación y peor aún acomodar su medida.

El tiempo de un silencio, aunque lo indique el autor o director, dependerá sobre todo del genio del intérprete y de su interrelación en esos momentos mágicos con los espectadores. También hemos de aceptar que de una representación a otra, nunca serán iguales. Y olvidémoslo, no se les puede domesticar o mecanizar.

El silencio incluye palabra y acción, que todo se pare, que el tiempo se detenga, que los espectadores sientan el vértigo de lo asombroso: un rayo verde, una aurora boreal, fuegos de san Telmo, una estrella fugaz, un cometa rojo rasgando el luto de la noche…

El silencio dramático es el corazón sobre el que palpita el drama, es el espíritu desde donde se eleva la tragedia y es el disparador descacharrante de la comedia.

El alma del teatro habita en sus silencios, en su pavor al vacío, en su espanto a lo desconocido, en su desconcertante humanidad, esto otorga al teatro la condición de la más humana de las artes.

Regocijaos con los silencios porque en ellos habita el alma del teatro.

Hay silencios que te provocan una conmoción y te dan un vuelco para arrebatarte toda lógica, toda razón.

También hay silencios que matan. Y aunque el personaje siga hablando sabes que ha dejado de existir.

El silencio dramático te deja suspendido en un vacío inmisericorde.

El gran teatro se alimenta de silencios precisos y únicos.

El misterio, como un pozo tenebroso, abre su bocaza en los silencios dramáticos.

El silencio a veces te ahoga y necesitas que reviente que estalle en griterío, gesticulaciones, lo que sea, porque se torna insoportable.

El silencio es respiradero y ahogo.

También cada héroe, cada personaje, necesita encontrar su silencio.

El silencio escupe sobre Don Juan cuando descubre los ojos de doña Inés.

El silencio encadena a Hamlet desde la hueca mirada de la calavera.

Un silencio de hielo se abre paso en la primera cuchillada que recibe la Celestina.

El silencio del sueño no consigue escapar de los párpados de Segismundo.

El silencio habita en el bastón de Bernarda Alba.

Ellos y nosotros lo necesitamos…

En estos tiempos de voces estentóreas, palabrería hueca y falsedades patrocinadas, dejad paso al silencio dramático, a la pausa, ella quizá nos ayude a orientarnos dentro del laberinto. Porque todo silencio dramático es espera.  Mudanza. Transformación. Vida. Es la espera de un nuevo tiempo, quizá de un nuevo teatro. Un nuevo teatro que nos saque de las otras pausas, las de los días oscuros y nos regale un giro inesperado, un cambio de guión, una sorpresa extraordinaria para bien de este arte.

Hoy, Día Mundial del Teatro benditos sean los silencios dramáticos. Y por festejarlos a ellos lo mejor es callar.

Gracias.

Alfonso Zurro, Taetrero 2019.

Taetro añade diez nuevas obras a su catálogo de mínimos

Alfonso Zurro, Taetrero 2019.
La asociación cultural Taetro, organizadora del Certamen de Teatro Mínimo Rafael Guerrero (pionero a nivel hispanoamericano de este género teatral), acaba de dar a conocer el fallo del jurado de la vigésima edición del concurso. Son diez los textos seleccionados por el jurado que se ha tenido que enfrentar a un centenar largo de textos originales procedentes de una quincena de países.

Eufrasio Jiménez, presidente de Taetro asegura que con la concesión de estos premios se confirman dos anhelos del colectivo chiclanero ya que “por un lado, ampliamos la nómina de autores premiados por primera vez (tan solo uno repite éxito) y por otro, certificamos que nuestro Certamen expande sus fronteras, cosa de la que nos sentimos muy orgullosos”.

Los textos premiados son los siguientes: Frente al espejo de Rafael Fabregat (Riudecols, Tarragona); La hora de Francisco Pérez Cánovas (San Javier, Murcia); La víctima de Felisa Moreno Ortega (Alcaudete, Jaén); La huida de Miguel Palacios (Salteras, Sevilla); El café de Marta Maranzano (Buenos Aires, Argentina); Parto de Daniel Cotta (Córdoba, España); Aula de locos de Pedro Catalán (Madrid); El fin de los tiempos de Federico Sopranis (Misalito, Texas, Estados Unidos); El barquero aguarda de Juan Antonio Molina y Carolina, trátame bien del chiclanero Zúh Malheur, ganador del certamen hace un par de ediciones. El jurado de la presente convocatoria ha estado conformado por Virginia León, periodista cultural de Diario de Cádiz; Lorena Mejías, del Colegio de Periodistas de Andalucía; Diego Jimeno, actor, profesor y jefe de estudios de la Escuela Municipal de Arte Dramático de Madrid y José Manuel Mudarra, director de Sennsa Teatro.

Lorena Mejías, durante la lectura del fallo del Certamen de Teatro Mínimo.
Taetro representará a lo largo de 2020 las obras que estime oportuno por sus posibilidades escénicas y todos los textos reseñados serán compilados en un libro de próxima aparición editado en colaboración con la Delegación de Cultura de Chiclana.

DÍA MUNDIAL DEL TEATRO

El fallo del jurado es uno de los actos organizados por Taetro en conmemoración del Día Mundial del Teatro. Este año, el evento central ha contado con la presencia de Alfonso Zurro, dramaturgo y director de escena, que ha recibido el Taetrero 2019, máxima distinción de la asociación chiclanera y que agradeció “este honor viniendo de quien viene: los amigos de Taetro que cumplen nada más y nada menos que 30 años de recorrido”. Zurro departió con los asistentes sobre su teatro y su labor al frente de Teatro Clásico de Sevilla, donde ha ofrecido montajes tan celebrados como los de Hamlet, Luces de Bohemia o La principita. El galardonado regaló a Taetro un manifiesto propio en el que alababa la figura de los silencios y las pausas teatrales. El acto, seguido por numeroso público, también contó con la representación de la obra Instrucciones para el suicidio, de Pedro Alejandro Filgueira.

Zurro junto a José María Román y Miguel Á. Bolaños.
El acto fue clausurado por José María Román. El alcalde de Chiclana agradeció el esfuerzo de Taetro por continuar su labor año tras año en pro de la cultura y el teatro y anunció que el colectivo “volverá a tener un convenio de colaboración con este Ayuntamiento para mantener ese trabajo constante” además de asegurar que van a iniciar trámites para la compra de la casa natal de Antonio García Gutiérrez, una petición de Taetro desde hace años para que sea convertido en centro referencia para los estudios sobre el Romanticismo. El regidor chiclanero aprovechó la ocasión para manifestar que el equipo de Gobierno tiene en mente desarrollar un Plan Estratégico de Cultura en los próximos años para, entre otras cosas, llevar actividades de índole educativo-cultural a los barrios de la ciudad y en las que Taetro sería parte interesada.

Por la tarde, los miembros de la entidad celebraron como es habitual su merienda junto al busto de García Gutiérrez. La lectura del manifiesto internacional escrito por el dramaturgo Carlos Celdrán y leído por José Alberto Cruz, delegado especial de Juventud, y la imposición de la bufanda al busto del literato chiclanero por parte de Juan de Lorenzo (joven integrante de Taetro) acompañaron el chocolate y las pastas con las que Taetro agasaja a los chiclaneros cada año. La escalinata del Teatro Moderno también fue escenario de un acto en celebración de los 20 años del Certamen de Teatro Mínimo Rafael Guerrero. La compañía gaditana Labaranda representó en plena calle uno de los mínimos premiados en la primera edición del concurso: Gerardo de Antonio Daniel García-Orellana.

Por último, en unos días, Taetro abrirá el plazo para la recepción de obras al XXI Certamen de Teatro Mínimo Rafael Guerrero.

Fotos: @ZuhMalheur